Obama está dispuesto a cerrar Guantánamo por decreto presidencial si no convence al Congreso
A Barack Obama se le acaba el mandato y no ha cumplido uno de los compromisos electorales con los que llegó al poder o por los que se le concedió en 2009 el Nobel de la Paz. El presidente de Estados Unidos se resiste a que en su legado no figure el cierre de Guantánamo.
El Gobierno instó este jueves al Congreso a quitar los obstáculos que ha impuesto para dar por terminada la actividad en la prisión, pero el tiempo se agota y los republicanos se niegan a que los reos puedan llegar a abandonar las instalaciones.
Si la Cámara no coopera, dio a entender Josh Earnest, portavoz de la Casa Blanca, Obama podría decretar por su cuenta la clausura antes de enero de 2017. «En este momento, yo no descartaría nada», declaró Earnest sobre que el mandatario pueda hacer uso de «todas las herramientas» a su disposición.
Los demócratas trabajan en un documento en el que detallan los pasos necesarios para liberar y transferir en condiciones de seguridad a territorio estadounidense o a terceros países a los poco más de cien reclusos que permanecen en el penal. Esperan poder convencer a sus rivales políticos.
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